Las mascarillas quirúrgicas son las recomendadas por las autoridades para protegerse y proteger a los demás del COVID-19. Esta decisión está basada en la efectividad que le aportan los materiales con los que se han creado. Te explicamos todo lo que has de saber sobre la composición de mascarillas quirúrgicas.

 

 

Composición de las mascarillas quirúrgicas; los materiales

 

 

Para la elaboración de las mascarillas quirúrgicas se utiliza habitualmente celulosa o polipropileno. Esos materiales se convierten en fibras que se superponen para crear una tela no tejida (TNT), también llamada non woven. Las telas que sí son tejidas no son recomendables para las mascarillas ya que entrelazan los hilos dejando huecos por los que se cuelan las partículas.

 

El compuesto a base de fibras no solo es el material óptimo para evitar que los patógenos lleguen a las vías respiratorias, también lo es para facilitar la respiración. Es suficientemente compacta como para retener la mayoría de los gérmenes en el exterior, pero permitir el paso del aire limpio al interior.

 

Pero no solo protege de los contagios por la entrada de virus y bacterias, también retiene los que se pueden portar. Por eso, no solo es importante la composición de las mascarillas quirúrgicas, también lo es el diseño. En estos casos, lo habitual es que consten de tres capas, para asegurarse de que la filtración del aire se realice en ambas direcciones.

 

¿Cómo son de efectivas las mascarillas quirúrgicas?

 

La efectividad de las mascarillas se mide en el laboratorio. Para ser consideradas como quirúrgicas es necesario someterlas a unos controles estrictos. En estos se mide la capacidad de retener partículas de entre 0,65 micromol (µm) y 7 µm. Una mascarilla quirúrgica debe tener una eficacia mínima de BFE ≥95 %. Por debajo de este porcentaje se consideraría higiénica.

 

¿Cuánto mide el virus del COVID-19? Entre 0,05 y 0,15 µm. Entonces ¿cómo puede ser que las mascarillas quirúrgicas tengan una efectividad superior al 95 %? Para que el virus se contagie ha de utilizar un transporte, como la saliva o las gotículas que se expulsan en la respiración. Estas tienen un tamaño suficiente como para ser retenido en la tela no tejida.

 

Pero no solo han de cumplir unos criterios de protección, también ha de tener una capacidad mínima para respirar. En este caso ha de ser como mínimo de 40 pascales por centímetro cuadrado (Pa/cm2). Niveles inferiores a estos dificultan la entrada del aire.

 

¿Cuántos tipos de mascarillas quirúrgicas hay según su diseño?

 

En el mercado hay tres tipos de mascarillas quirúrgicas según su diseño. Están diferenciadas de las higiénicas por la normativa EN14683:2019, EN14683:2005 y ASTM F2100 (USA) y la directiva 93/42/EEC. Pero, además, llevan un indicativo mostrando si son de tipo I, II o IIR.

 

  • Tipo I. Filtración mínima del 95 % y facilidad de respirar superior a 40 Pa/cm2
  • Tipo II. Filtración mínima del 98 % y facilidad para respirar superior a 60 Pa/cm2
  • Tipo IIR. Filtración mínima del 98 % y facilidad para respirar superior a 60 Pa/cm2 y resistencia a las salpicaduras mínima de 16 kilopascales (kPa).

 

La composición de las masacrillas quirúrgicas Triomed las convierten en unas de las más seguras del mercado. Son del tipo IIR y tienen una eficacia del 99 %. Esto se debe a que, no solo retienen virus y bacterias, también los desactivan. Así se minimizan al máximo los riesgos.