Los tests de contaminación son imprescindibles para obtener una visión de los patógenos presentes en una superficie o en un organismo. Los resultados obtenidos determinarán la necesidad de aplicar medidas o la efectividad de los tratamientos o ensayos clínicos realizados en un laboratorio.
¿Por qué son necesarios los tests de contaminación?
Los diferentes tipos de test de contaminación se ajustan a las necesidades del análisis. Es decir, cada prueba debe tener un objetivo y realizarse en unas condiciones determinadas. Esto se debe a que los patógenos pueden ser muy diferentes y reaccionar de distinta forma dependiendo del ambiente en el que se encuentren.
Entre los test de contaminación más habituales se encuentran los realizados a los alimentos. Algunos pueden contener bacterias nocivas y otro tipo de microbios, capaces de infectar y enfermar gravemente a los seres humanos o los animales. El análisis alternativo de los productos podría evitar una propagación descontrolada de microorganismos peligrosos e incluso letales.
Algo parecido al ejemplo anterior podría ocurrir con el agua. El análisis del agua, tanto la proveniente de la red como la de los acuíferos, puede evitar que esta llegue al organismo de los seres vivos. Además, permite el control, ya que, si se da contaminación, podría revertirse con ciertos productos químicos aptos para el consumo humano en cantidades seguras.
¿Cómo se realizan los tests de contaminación?
Generalmente, los test de contaminación se realizan por medio de la extracción de muestras. En algunos casos se recoge un poco de agua, se aísla un alimento o se obtiene una impregnación por medio de un apósito humedecido con una solución. En todos los casos, se lleva a un laboratorio para analizar la muestra al microscopio o contrastarla con ciertos productos. Estos pasos determinarán si existe contaminación, de qué tipo y cómo evoluciona en determinadas circunstancias de temperatura, humedad y luz.
Existen otros tipos de test, muy valiosos para la prevención. Estos se llevan a cabo generando ciertas condiciones y contaminando deliberadamente una o varias muestras. Una vez realizado este paso, se procede a encontrar una fórmula que sea capaz de detener la propagación e incluso neutralizar o destruir el patógeno. Son muy importantes para anticiparse y prevenir las infecciones en centros hospitalarios, instituciones públicas e incluso en las calles.
La importancia de los test de contaminación en Triomed
En Triomed hemos utilizado los test de contaminación para encontrar productos como mascarillas o esparadrapo antimicrobianos. Han sido determinantes para conocer la evolución de bacterias, virus, hongos y otros patógenos y encontrar un tratamiento efectivo para su destrucción.
Las mascarillas y el esparadrapo que elaboramos en Triomed son antimicrobianos. Tienen la capacidad de destruir al 99 % de los patógenos, siendo un elemento de protección de valor incalculable, especialmente en centros sanitarios. También han sido de gran ayuda en la pandemia de coronavirus, evitando más contagios por vía aérea que las comunes. Todo esto ha sido posible gracias a nuestros test de contaminación y al incansable trabajo de los profesionales que han buscado una forma eficaz de acabar con ellos. Por supuesto, el trabajo no ha terminado. Siempre seguiremos innovando para tu protección.